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Germinación

¿Qué procesos de germinación existen?

La germinación es el proceso mediante el cual un embrión se desarrolla a partir de las semillas de marihuana hasta llegar a convertirse en una planta. Hay dos maneras diferentes de poder realizar el proceso de germinación de la planta de marihuana: 

  • Germinación directamente en tierra: 

Para hacer el proceso de germinación de la planta de marihuana directamente en tierra, lo primero que debes hacer es realizar un orificio de 1 cm de profundidad aproximadamente (ayúdate con la punta de un lápiz o bolígrafo). 

Seguidamente pon las semillas de marihuana en el orificio y la vuelves a cubrir con la tierra. 

Después debes regar con mucho cuidado, es por esto que aconsejamos regar con un pulverizador. De esta manera evitaremos que la fuerza del agua a la hora de regar pueda llegar a remover la tierra. 

En el momento en el que la planta comience a brotar, deberemos colocarla en algún lugar donde reciba luz, pero que no sea una luz demasiado intensa para evitar que se seque la tierra. 

 

  • Germinación fuera de la tierra: 

Este es uno de los procesos más utilizados para germinar las semillas de marihuana.

Lo primera que debes hacer es colocar las semillas entre varias capas de papel húmedo (se recomienda que sea papel de cocina resistente, ya que otros tipos de papel pueden llegar a deshacerse y hacer que las raíces puedan llegar a enredarse.) 

El papel húmedo se tendrá que poner en un plato, el cual será tapado con otro plato por encima a modo de tapa, para evitar que se llegue a secar.  También se puede utilizar un tupperware. 

Es importante que durante el tiempo que estén tapadas debemos intentar que nos les de la luz, es decir, dejarla guardadas en un lugar oscuro. Conoce algún modelo de armario de cultivo interior, ideal para mantener el ambiente perfecto para el crecimiento de la planta.

Una vez observamos que las semillas comienzan a sacar una pequeña raíz, entonces deberemos hacer el cambio y pasarlas a las macetas con tierra, enterrándolas a 1 cm de profundidad. La dejaremos en un lugar donde quede protegida del sol, y la pulverizaremos con agua para mantener así la tierra húmeda 

Si por el motivo que sea observamos que la semilla aparte de sacar más raíz, también ha sacado brote, deberemos enterrar solamente la raíz y dejar el brote fuera de la tierra. En este caso, es conveniente que la planta comience a recibir luz, pero sin sobreexponerla al sol intenso, y manteniendo siempre húmeda la primera capa de tierra. 

En esta primera fase es importante que la planta tenga agua en abundancia. Se aconseja pulverizar diariamente la planta. 

Una vez salga completamente la planta, colócala bajo una fuente de luz ya sea natural o artificial.